Alma

Alma caminaba conmigo en el parque, siempre fue nuestro lugar favorito. Nos conocimos en ese parque hace más de 50 años. Cuando pasábamos frente al higuerón que tanto nos gustaba tomó mi mano.

—Fuiste tan dulce esa tarde, corrimos a ese árbol, estábamos empapados, yo te abracé con tanta fuerza. Ya no sentía frío, fue así como nos hicimos novios, sentirte tan cerca de mí, tu calor, el latido de tu corazón contra mi oído. Este árbol es maravilloso, se ve igual que esa tarde ¿Lo recuerdas?— me dijo Alma mientras mirábamos el árbol de frente. —Claro que lo recuerdo Alma, este corazón sigue siendo tuyo, mi amor— le dije mientras besaba su mano.

—A veces tengo miedo—le dije sin pensar. —Yo también tengo miedo, pero mira este árbol— hizo una pausa justo cuando una brisa hizo bailar el enorme árbol.—El miedo es difícil de superar, porque se apodera de uno, pero hasta este enorme árbol no va a estar aquí para siempre, a veces saber que nos vamos a ir es lo que realmente hace que la vida importe—le volví a besar la mano y la abracé. Quería que escuchara mi corazón de nuevo, ya que como aquella tarde, latía como la misma fuerza por ella.

El abrazo terminó con una dulce sonrisa de Alma, tomé su mano, y vimos el árbol. De nuevo una brisa corrió por el parque, ella apretó mi mano y la soltó, sabía que la había perdido de nuevo.—¡Qué adorable parque! ¿Vienes a menudo?—me dijo Alma con una mirada perdida.—Sí, aquí conocí a mi esposa—le respondí mientras empezamos a caminar.

About the Blog

We’re dedicated to sharing enchanting tales from our globe-trotting adventures, bringing you authentic experiences, hidden gems, and practical travel tips.

Newsletter

Subscribe now to fuel your wanderlust, and join our community of passionate explorers. Don’t miss out – your next adventure awaits!